El lunes 24 de octubre, la Oficina Anticorrupción (OA) participó como disertante en la Jornada “Integridad: tu aliada para aumentar el valor de tu empresa” organizada por el Gobierno de México.

Durante el encuentro virtual, la directora nacional de Ética Pública, Natalia Torres, explicó cómo surgió la idea de impulsar el Registro de Integridad y Transparencia para Empresas y Entidades (RITE). “Una de las primeras cosas que pensamos cuando asumimos la gestión en la OA, es que a la hora de pensar políticas de integridad debíamos pensar qué entendíamos por integridad, o antes de eso, qué entendíamos por el fenómeno de la corrupción”, porque esta forma en que se piensa y se comprende “va a condicionar de manera estructural el tipo de políticas que llevemos a cabo”.

“Nosotros armamos una red de investigadores e investigadores Red EMIC vinculados con el estudio de la corrupción con quienes empezamos a vislumbrar aristas”, describió la funcionaria y agregó: “el fenómeno de la corrupción es complejo y exige pensar diferentes aristas. Ocurre en distintos espacios, no exclusivamente en el sector público, sino que los fenómenos de la corrupción ocurren en el sector público, privado y en la interacción entre ambas. Si entendemos esa complejidad tenemos que pensar políticas que atiendan tanto al sector público como al privado”.

De esta manera, la directora nacional de la OA realizó un recorrido conceptual que funcionó como base en la implementación del RITE: “RITE es una herramienta que atiende a la realidad del sector privado y que tiene como objetivo mejorar las capacidades del Estado para la toma de decisiones en la vinculación entre el sector público y privado”, expresó la funcionaria de la OA. Para finalizar expresó: “se trata de generar información pública acerca de los compromisos de integridad que venían desarrollando las empresas”.

Cabe destacar que el Registro de Integridad y Transparencia para Empresas y Entidades es una iniciativa de la OA con apoyo del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) donde las empresas pueden mostrar sus compromisos en materia de integridad.